sábado, 30 de julio de 2011

Ya no creo en los cuentos, esos que acaban "siendo felices y comiendo perdices". Ni tampoco quiero un Príncipe Azul. Suelen ser rubios, y prefiero los morenos. Todos llevan caballos, y esos animales no me terminan de hacer gracia...No me llama la atención eso de vivir en un castillo, mi casa es bien grande, ya estoy acostumbrada a vivir en ella. Tampoco sueño con ser esa princesa con cara de muñequita y con todo el oro del mundo, me conformo con lo que tengo, no quiero más. A lo mejor no es tan mala idea esa de tirar la toalla, pero es que hay algo que no me deja, ¿será la maldición de alguna bruja? ¿Pero qué digo? ¡¡yo no creo en los cuentos!! O a lo mejor si, a lo mejor soy la típica chica que sueña con ser princesa, y que cree que tarde o temprano ese príncipe azul vendrá a por ella en su caballo, se casaran, serán felices y comerán perdices, viviendo en un enorme castillo.
Pero dejémonos de tonterías, ni tú eres un príncipe azul ni yo una princesa, ni vendrás en caballo ni comeremos perdices, y mucho menos viviremos en ningún castillo...pero hay algo en los cuentos que podemos hacer juntos...ser felices :)

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